El plantel se entrenó por la mañana priorizando la fuerza y la velocidad, donde las condiciones climáticas obligaron a culminar la jornada prematuramente. Pensando en el compromiso que se avecina, Marcos Cáceres se recuperó y estará en condiciones de regresar.
Los jugadores de Racing intentaron empezar con la semana de trabajo con la idea llegar de la mejor forma al encuentro del próximo sábado ante Huracán, en el Cilindro, pero debido a las intensas lluvias interrumpieron el entranamiento una hora luego de comenzado.
Alrededor de las 10 horas el cuerpo técnico dispuso trabajos en el gimnasio, pasada media hora se trasladaron a la cancha auxiliar para realizar las habituales pasadas en la cancha auxiliar, donde también se ejercitó la resistencia y la velocidad, pero a las 11 se terminó abruptamente el entrenamiento.
La buena noticia del día, la entregó la participación de Marcos Cáceres, quien practicó a la par de sus compañeros sin evidenciar secuelas del esguince de tobillo que lo marginó del partido del pasado domingo frente a Tigre. De esta manera, el retorno del paraguayo marcaría la salida del equipo titular de Roberto Ayala, su reemplazante en Victoria.
Asimismo el cuerpo médico siguió de cerca la situación de José Luis Fernández, Giovanni Moreno y Patricio Toranzo, quienes terminaron el encuentro ante Tigre con algunos golpes.
Al mismo tiempo, el entrenador Miguel Ángel Russo estaría analizando la posibilidad de modificar la ofensiva. Ante la evidente falta de profundidad y peso en ataque la jornada anterior, el DT podría incluir otro delantero para acompañar al solitario Pablo Luguercio en ataque. De ser así, la incógnita por develar se concentrará entre Gabriel Hauche y Claudio Bieler, las dos opciones.
Luego de tener la tarde libre, el plantel regresará a los entrenamientos mañana desde las 9:30, en el estadio.
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