Miguel Ángel Russo, habló tras el partido suspendido ante Atlético Tucumán por causa de la intensa lluvia. El técnico dijo que "en esas condiciones era imposible seguir jugando".
Empapado, Miguel Ángel, le pedía al cuarto árbitro que Favale suspendiera el partido. El técnico de Racing se refirió a la acertada decisión del árbitro de suspender el encuentro en Tucumán. "Ya desde el banco se veía que los últimos 10 minutos estaban de más. Llovió como nunca. Es mas, afuera está todo inundado, no nos vamos hasta las 2 de la mañana, je", comentó.
"No se veía nada, era una cortina de agua. En la jugada del penal (que Jorge De Olivera le atajó a Luis Rodríguez), recién me di cuenta que la infracción previa la había cometido Yacob, porque el árbitro lo amonestó”, afirmó el entrenador de la ‘Academia’.
"Además -continuó Russo- las descargas eléctricas eran un peligro para quienes estaban dentro del terreno de juego”.
También se refirió a la polémica jugada de la pena máxima sancionada por el colegiado. "No sé si fue o no penal, pero tuvimos la suerte y estuvo bien nuestro arquero, esto es bueno para él", explicó el técnico de Racing sobre la gran chance que De Olivera le tapó a Rodríguez. Pero sobre la suspensión, Russo fue contundente. "En media hora llovió todo. Desde el banco no se podían ver los arcos. Y cuando la visión se obstaculiza así, es muy difícil. Había truenos, relámpagos... El partido es difícil de analizar".
Para finalizar, Russo expresó: "A nosotros se nos complica un poco el panorama por el viaje, pero debemos aceptar la realidad. Si por mí fuera, el partido lo jugaría mañana mismo, aunque es imposible".
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