martes, 13 de abril de 2010

González, ¿el malo de la película?

El hincha de Racing se lamentó muchísimo por la paliza que le dio Estudiantes, agradeció que solo hayan sido cuatro los goles, pero lo que más lamentó es que “el muerto” de Leandro González haya convertido dos goles, justo cuando en 29 partidos en Racing sólo hizo tres. La pregunta es: ¿realmente es un muerto Leandro, o los hinchas de Racing son tan especiales que hacen que ningún jugador rinda en el equipo?

Luego de marcar su primer gol, el tercero de su equipo, definiendo cruzado con una categoría sorprendente, Leandro González se dio media vuelta y salió caminando despacito, cabizbajo, y hasta se le notaba un dejo de culpa en sus gestos. Pero dicho gol desató una tormenta en la tribuna visitante. A partir de ahí la Guardia Imperial empezó a hostigar a sus jugadores de una manera más notable.

Cuando Leandro González marcó el cuarto, otro golazo, de distinta factura al anterior, sí se hizo notar, salió corriendo para la tribuna que estaba insultando a sus ex compañeros, a sus amigos como él los llamó luego, y los miró desafiante. El mal momento que estaban viviendo sus amigos le hizo acordar lo mal que la pasó en Racing, y se desquitó.

El primer gol no lo festejó, el pibe buenazo de Pigüé se mostró agradecido del club que lo depositó en el fútbol grande, pero para el momento del segundo gol la situación era distinta. La tribuna visitante era un hervidero, y al ver la actitud del jugador al que tan despectivamente se lo había tratado en su paso por el club el clima fue aún peor.

El mismo hincha de Racing que insulta a los cuatro vientos porque González en Racing no servía para nada y ahora “nos viene a hacer dos goles”, es el mismo que insulta porque Tito Ramírez en Racing no le hacía un gol ni al arco iris y ahora en Banfield es candidato al Pichichi con menos de la mitad de partido jugados en Racing, y también es el mismo que se pregunta si el Chino Luna que se cansa de hacer goles en Tigre es mismo que flaquito desgarbado del que nos reíamos porque apenas pisaba el pasto del Cilindro se caía.

Ya no quedan dudas de que la hinchada de Racing es la más seguidora, que está siempre en las buenas, y en las malas, mucho más, pero no será hora de pensar en que la famosa Guardia Imperial está haciendo algo mal al no aguantar a los jugadores, al insultarlos apenas comete el primer error y condenarlo por ese error para siempre.

Leandro González en uno de sus primeros partidos con la camiseta de Racing hizo un gol que le hizo ganar el partido a Racing contra Argentinos, en el mismo torneo hizo el segundo de tres goles a River para empatar en tres, y otro gol suyo, una corajeada le aseguró el triunfo contra Gimnasia de Jujuy que le hizo olvidar a Racing de la promoción y del descenso en la gran campaña de Caruso.

Hay más datos, González jugó 29 partidos en Racing, pero sólo 18 como titular, y en su posición, la de delantero, la que ayer tan bien aprovechó Sabella, actuó nada más que ocho encuentros. Tres goles en ocho partidos para un delantero no está nada mal. Es más o menos el promedio que tenía un delantero llamado Diego Alberto, y que la mayoría de los hinchas deformaban su apellido y le decían “Malito”.

Hay más ejemplos, un tal Ezequiel Miralles pasó por Racing en la temporada 2006/7, ahora es goleador y campeón en Chile con Colo Colo.

El zurdo volante Gabriel Méndez surgido de las inferiores de Racing, hace goles en la Libertadores para el Deportivo Cuenca ecuatoriano, el mismo país donde Claudio Bieler fue goleador y además tricampeón internacional, y también goleador en una de esas copas. El mismo Claudio Bieler que es insultado por la hinchada de Racing porque desde que llegó marcó sólo dos goles.

La misma hinchada que insultaba a Rubén Capria porque no corría y al mismo insultaba a Pablo Michelini porque no tenía buen pie. Igual que había hecho años antes con Ruben Sosa, al que le pedían que corriera mientras que insultaba a Manfredini y Mansilla porque no salían jugando.

Los ejemplos sobran, basta recordar las puteadas al Bichi Fuertes, que cuando jugaba en Racing era un burro, y ahora que juega en otro club nos hace goles hasta con la nuca.

Mirando la actualidad de Racing nos encontramos con un gordísimo Hugo Gottardi en el banco ayudando a Russo, el mismo Gottardi que hace 30 años luego de hacer 60 goles con la albiceleste lo echamos y se fue a Estudiantes para salir campeón y ser uno de los máximos goleadores de la historia pincharrata. La misma suerte corrieron Trama y Fortunato. La misma que Maxi Moralez, que quería seguir en Racing pero se tuvo que ir a Vélez para salir campeón y jugar las copas.

Por eso yo me pregunto, ¿no será hora de revisar si no estaremos haciendo algo mal?

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