El enganche aseguró que cada vez que le toca ser titular, al equipo se le exige jugar mejor. Además, reconoció que le costo adaptarse y sostuvo que quiere que le renueven el contrato, que vence el 30 de junio.
Lo sabe. Y no mira para otro lado ni juega al distraído. Con humildad, Sebastián Grazzini reconoce que su presencia en el equipo le impone a Racing un mandamiento. “Noté que cuando me toca estar, se pide que el equipo juegue mejor”, sostuvo el enganche en declaraciones televisivas.
A pesar de admitir la importancia del enlace en la estructura del equipo, Grazzini remarcó: “Hay buenos jugadores en el plantel y la gente de Racing exige. Cuando jugué, me brindé al máximo. Pero el rendimiento colectivo no debe depender sólo del enganche, sino que se debe salir jugando bien desde abajo”.
El Mágico afirmó que hubo diferentes factores que le impidieron adaptarse con facilidad al equipo. “Me costó acomodarme apenas llegué, sufrí luego pubialgia y ahora estoy contento porque el equipo está jugando bien y gana”, explicó.
Para Grazzini, en los últimos tres partidos Racing mostró una gran cuota de personalidad y actitud que le permitieron quedarse con la victoria en los tres partidos. “Contra Vélez perdíamos y lo dimos vuelta; contra Atlético Tucumán jugamos bien, en una cancha difícil y frente a Banfield hicimos un buen segundo tiempo”, analizó.
El ex volante de Newell’s Old Boys describió su relación con la redonda: “Me gusta estar en contacto siempre con la pelota pero aprendí que debo ser determinante en las pocas ocasiones en que participe del juego”.
El próximo viernes Racing enfrentará a Tigre, equipo dirigido por Ricardo Caruso Lombardi. Hace unas semanas, el entrenador fue acusado por Omar Asad de cobrar dinero a los jugadores para ponerlos en sus equipos. Grazzini, quien fue dirigido en Newell’s y Racing por Caruso, declaró: “Conmigo nunca paso nada. Ese altercado fue producto de las calenturas que hay dentro de un partido. Seguramente, se dieron cuenta de que cometieron un error. Son dos grandes técnicos”.
El 30 de junio será una fecha trascendental para el futuro del Mágico, ya que ese día vence el contrato que lo une a Racing. “Tengo ganas de seguir acá. Por lo que escuché, los dirigentes también quieren que me quede, así que creo que no habrá problemas para renovar el contrato. Estoy cómodo en el club”, sentenció con la firmeza de quien sabe que su presencia obliga a amigarse con la redonda y apostar por el buen juego.
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