El recordado mediocampista, Julio Olarticoechea, campeón de la Supercopa en 1988 y gran emblema en México ‘86, dejó sus impresiones respecto al presente académico. Su paso por el club, el panorama del director técnico como formador y la escasez de líderes en el fútbol presente, fueron varios de los temas en una charla imperdible, realizada anoche en Identidad Racinguista, donde aseguró que “Prefería que me digan trolo, antes de que me cuidaba las piernas cuando estaba en Racing”. Y agregó: “Jugué con la herida abierta tres días después de una operación, hasta me salía pus”.
-¿Qué opinión te merece el presente de Racing?
-Normalmente, no puedo ir a la cancha. Llevo adelante las actividades con la Selección Juvenil de fútbol, en Saladillo, donde vivo con mi familia. A Racing lo sigo por televisión.
-Luego de tu paso por el club (1976-1981/1988-1990) te identificaste gratamente con los colores.
-Me inicié en Racing siendo hincha de River, pero después me di vuelta. Hice las inferiores en un club que te atrapa emocionalmente, a pesar de haber pasado por momentos difíciles, sobre todo desde lo económico. Aún así, el cariño de la gente pudo más.
-Tenés gran afinidad con varias glorias del club. Por estos días ¿te encontrás con algunos de tus ex compañeros?
-Todos los jueves nos juntamos con el "Chango" Cárdenas y Juan Barbas a almorzar. Solemos recordar viejos momentos y coincidimos en haber disfrutado todo ese tiempo. Por supuesto, hablamos de Racing, entre otros temas.
Se detiene por un momento y piensa. Analiza su arribo en Selecciones Juveniles y demuestra preocupación por cierta insensatez en la administración de los recursos económicos. Tiene incorporada su visión como entrenador y la comparte, sin vueltas.
-"La parte económica se reparte mal en el fútbol. Uno no pretende ganar el dinero que percibe un entrenador de Primera División, pero como técnico en divisiones menores, formás e iniciás a muchos proyectos que luego terminan siendo una realidad. Y eso merece una mejor retribución" afirma.
-En reiteradas oportunidades, los jugadores profesionales carecen de dinámica. ¿Creés que se trabaja menos que antes en el fútbol?
-Quien tiene que cambiar la metodología de trabajo es el entrenador, no el futbolista. Se debiera priorizar más la técnica; que el jugador tenga mucho más contacto con la pelota durante la semana.
-Los últimos clásicos (frente al eterno rival) muestran a un equipo que pareciera no sentir la obligación de ganar el encuentro, en este caso, Racing. Ahora, el adversario sí lo toma en serio, ¿por qué se está sucediendo esto en los últimos años?
-Cuando debuté a los 17 años, estaba rodeado de grandes jugadores, como (Agustín) Cejas, el "Panadero" Díaz, entre otros. Grandes líderes, todos.
Hoy, la falta de protagonismo se debe a la ausencia de referentes y lo puede estar sufriendo el plantel. Pienso que la llegada de un jugador como Roberto Ayala puede darle al vestuario de Racing lo que esté necesitando.
Se despide agradecido. No quiere dejar pasar la oportunidad para hacerse eco de las palabras de Rubén Paz, en el diálogo de la semana pasada.
-No quiero olvidar de nombrar a una persona tan querida como "Tita" Mattiussi, una madre para todos; inolvidable para quien haya estado en el club. Nombrar a Racing es nombrarla a Elena, siempre recordada en mi memoria.
Matías Echeverría
matias@identidadrc.com.ar
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