El colombiano le daba el triunfo a Racing en el Monumental con una pincelada digna de su calidad. Sin embargo, Buonanotte necesitó de 42 segundos en el complemento para sellar el empate. Daba la sensación de que River se lo llevaba por delante, pero La Academia sofocó el aluvión a tiempo y olfateó el segundo en varias ocasiones. Fue 1 a 1 en Núñez.
Tanto el primer tiempo como el segundo fueron similares. Lo tuvieron a River como protagonista en los minutos iniciales y a Racing ejerciendo el control de la pelota a partir del cuarto de hora y con las ocasiones de gol más claras de la tarde.
En la etapa inicial, Lamela probó de zurda a colocar, pero la pelota se fue apenas desviada del palo derecho del arco de De Olivera. Daba la impresión de que el local se quería comer a su rival. No obstante, luego de los 15’ empezó a aparecer el hombre diferente que tiene el plantel de Avellaneda.
Giovanni Moreno se tiró por derecha, casi como un cuarto mediocampista, y encaraba a Arano una y otra vez. Lo marcaban entre dos o tres, pero siempre el colombiano lograba zafar. En el estreno de Racing con el peligro, el número diez arrancó desde la izquierda y apiló a tres contrarios, aunque luego Carrizo le ganó el mano a mano.
Sin embargo, la revancha no tardaría en llegar. Patricio Toranzo, a quien hay que tenerle paciencia porque pide todas aunque a veces se equivoque, metió un hermoso cambio de frente para que Moreno quedara mano a mano con Chiche Arano dentro del área. El movimiento clave del racinguista (Arano no, Moreno) fue cuando desacomodó con el cuerpo a su marcador y quedó mejor parado para recibir la pelota. Luego se perfiló para su zurda y definió cruzado para hacer delirar a las más de 5 mil almas académicas que estaban en el Monumental.
Antes del gol, Bieler había definido mal un gran pase de G10. Luego del gol, entre Fernández y El Taca no pudieron empujar una pelota que merodeaba por el área chica. Es decir, Racing no se metió atrás nunca y le dominó el partido a River durante 30 minutos.
No obstante, el insultado Cappa movió el banco, modificó el esquema a línea de tres y metió a Buonanotte por Ortega para el complemento. Racing salió intacto y dormido, porque en la primera que tocó el oriundo de Teodelina (Santa Fe) castigó de zurda desde una posición similar a la de Moreno y venció a De Olivera.
Con menos de 60 segundos en cancha, Buonanotte volvía a convertirle a Racing. El panorama no era bueno. River ya había empatado y tenía la pelota en todas las jugadas. La gente, callada en el PT, se levantó de sus asientos y motivó aún más al equipo, que parecía llevarse por adelante a La Academia.
Moreno no podía tenerla, Hauche ya no la aguantaba, a Bieler lo habían absorbido. A su vez, Buonanotte estaba intratable, Ferrari era un ida y vuelta y Pavone generaba falta tras falta. Sin embargo, Yacob y Toranzo fueron los que comenzaron la remontada desde el círculo central y Racing pudo resurgir de las cenizas.
El ex Huracán trataba de jugar por abajo. Moreno se había estacionado en la derecha y con sutiles toques generaba situaciones. El gol estuvo más cerca en los pies de Bieler, pero el ángulo superior izquierdo del arco de Carrizo estalló ante el ahora buen remate del delantero. Hauche no llegó a puntearla en un remate de Moreno. Aveldaño casi grita de mediavuelta. El propio Toranzo tuvo un par de remates peligrosos que se fueron cerca…
En resumen, Racing mereció más. Dominó la pelota, la trató a ras del césped, generó situaciones, no se metió atrás y supo controlar a tiempo la presión del local cuando se vio motivado por el empate. El punto es importante (se capitalizará con una victoria ante Arsenal), pero viendo los 90 minutos queda la sensación de que algo más se podría haber rescatado del Monumental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario