domingo, 28 de febrero de 2010

No terminó en paz

Una vez finalizado el clásico de Avellaneda varios jugadores de Independiente y Racing cruzaron insultos en la manga que los lleva al vestuario. Además, dirigentes de la Academia fueron amenazados por ’barras’ del Rojo.

Primero hubo peleas entre los futbolistas, y mientras tanto, en otro lugar de la cancha dirigentes de Racing fueron amenazados por presuntos barras de Independiente, quienes terminaron sufriendo una feroz golpiza, según comentaron allegados académicos.

Los jugadores locales Walter Acevedo y Leandro Gracián ingresaron al vestuario gritando “p…se van a la B”, cuando se encontraron en ese momento con varios jugadores de Racing rezagados, entre ellos Lucas Aveldaño.

El ex zaguero de Atlético Rafaela encaró a Gracián y a Acevedo y les gritó: “decímelo en la cara” y de inmediato le arrojó piñas a los dos, que no llegaron a destino, según relataron testigos del hecho.

En ese momento se produjo un tumulto y cuando parecía que todo terminaba en un escándalo, efectivos policiales separaron a los jugadores.

Casi en el mismo momento un grupo de dirigentes de Racing fueron increpados por presuntos barras de Independiente, quienes estaban en una zona no permitida, al punto que era el pulmón que separaba a los hinchas.

Los presuntos barras golpearon la puerta del palco donde estaban los dirigentes gritándoles “se van a la B” y “los vamos a matar”.

En ese momento salieron dos dirigentes, con otro atrás, y corrieron a los cuatro hinchas propinándoles una feroz golpiza, sin que pase nada ni que haya detenidos.

Una vez que trascendió esto, el presidente de Independiente, Julio Comparada, fue al vestuario de Racing a pedir disculpas por lo sucedido pero no lo dejaron entrar y lo echaron de la zona insultándolo ante la presencia de varios periodistas.

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