La Academia goleó dentro y fuera de la cancha. Fue un tres a cero contundente desde el verde césped y en la tribuna se escucharon canciones de todo tipo. Una verdadera fiesta.
Una noche llena de emociones. La alegría de ver a un Racing golpeando compulsivamente en el arco contrario y ver al vecino cerca de la promoción hicieron unas horas distintas.
La gente se acerco en un gran número al estadio Juan Domingo Perón. “Racing mi buen amigo, esta campaña volveremo a estar contigo, te alentaremos de corazón, esta es tu hinchada que te quiere ver campeón, no me importa lo que digan, los del rojo y los demás, yo te sigo a todas partes cada vez te quiero más”, entonaban eufóricos los simpatizantes académicos cuando sus jugadores salían al campo de juego.
Con los hermanos Zuculini como titulares, Racing buscaba tres puntos importantísimos para conseguir dos victorias consecutivas y así, seguir escalando posiciones. “La plata se acabo, la plata se acabo, y ahora Independiente, se va a la promoción”, las risas y cargadas adornaban el colorido popular.
El partido comenzó y Newell´s se apoderó de los primeros minutos del partido. “Vamo Racing vamo, ponga huevo que ganamos”, cantaban los hinchas para levantar al equipo.
Pese a estos minutos, el partido tomó otro rumbo y el mejor delantero del fútbol argentino convirtió el primer gol de La Academia. “Es la número uno, es la guardia imperial, que alegría que alegría, ole ole ola, vamos Racing todavía, que estas para ganar, como esta hinchada loca, seguro que no hay, te sigue a todas partes, te alienta hasta el final”, la multitud festejaba y enseguida acompañaba: “Ole ole ole ole, te oteo”.
La banda estaba de fiesta, el señor Teófilo Gutiérrez enloquecía a los hinchas. Las ganas de cantar se hacían notorias en todo el Cilindro, por eso La Guardia Imperial acompañaba “Racing es mi alegría, yo por vos, dejo la vida, ni la quiebra, tampoco el descenso, nada puede con el sentimiento que siento por vos, yo te llevo en el corazón, por eso vengo, la acade, mi pasión, la alegría de mi corazón, la acade siempre voy, esta hinchada quiere ser campeón”.
El segundo tanto llegó de un defensor que venía teniendo poco recorrido en este campeonato. Lucas Aveldaño convirtió para Racing y el partido se encontraba dos a cero para los locales.
La cancha se empapelaba de celeste y blanco, la emoción dominaba el corazón de todos los racinguistas que veían un juego lujoso por parte de sus protagonistas de sueños. “Dejo todo por La Academia, ganes o pierdas te sigo igual, un sentimiento inexplicable que se lleva adentro no puedo parar, vamo academia, que tenes que ganar, vamo academia la vuelta vamo a dar, vamo academia, no le falles a toda la gente”.
Los primeros 45 minutos finalizaron y se vio un Racing dominador en todos los espacios del campo de juego. Un dos a cero contundente para los dirigidos por Miguel Ángel Russo.
En el entretiempo se escuchó el tema nuevo que se empezó a cantar en la cancha de Arsenal el sábado pasado: “Yo te sigo a todas partes dónde vas, donde juegues, yo voy a estar, siempre alenté, jamás te abandone, vamos Racing que tenemos que ganar, la tribuna esta de carnaval, no nos falles, hoy te vinimo a ver, yo a vos te voy a seguir, lo juro hasta la muerte, porque la número uno es una hinchada diferente.. Nadie comprende que Racing es un sentiento, que se lleva adentro y no puede parar, no caben dudas que acá en Avellaneda, manda la academia y el rojo corre con la guardia imperial”.
La segunda mitad comenzó y Valentín Viola ocupó el lugar de Pablo Lugüercio. “Vamo vamo vamo la acade, vamo la acade”, los hinchas se ubicaban de a poquito y La Guardia Imperial comenzaba a hacer sonar sus bombos.
La banda quería estar de fiesta, había que repetir lo del primer tiempo. “Para venir a Racing (tun tun tun) para venir a Racing se necesita un poco de locura (tun tun tun) un poco de locura y otra cosita hay arriba y arriba”.
Los lujos se hicieron cargo del partido y La Academia manejaba el partido por todos los espacios. Patricio Toranzo salió reemplazo por Luis Fariña y se escuchó la primera ovación para el ex Huracán desde que arribó a Racing: “Ole ole ole ole, pato pato”.
Un lesionado en la mitad de cancha le dio lugar a la explosión en la popular: “De pendejo te sigo junto a Racing siempre a todos lados, nos bancamos la quiebra, el descenso y fuimos alquilados, no me olvido ese dia, que una vieja chiflada decía, que Racing no existía, que tenía que ser liquidado”.
La hora de cantar contra los amargos había tocado sus primeras campanas: “De pendejo vos lo vas a ver la amargura llevas en la piel, muchas copas vos podrás tener, no una banda como la acade”, “Independiente vos sos un cagón, vos sos la amargura, sos la p…. de Avellaneda ya no quedan dudas”, “Independiente al hospital, Independiente al funeral”.
Para redondear una noche magnifica Teo convirtió el tercero de una manera exótica: Amague de fusilamiento, picadita ante el guardameta. La hinchada estaba con ganas de abrazar al colombiano y agradecerle por todo lo que está haciendo en el club.
El encuentro terminó y La Academia pudo festejar. Un sábado tranquilo y un domingo con ganas de ver fútbol, aunque ningún equipo va a jugar como hoy jugo La Academia, que la sigan..
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