La Academia perdió un encuentro increíble. La gente copó la canchita de Argentinos pero nada alcanzó para lograr una victoria, unos tres puntos que volvían a poner a Racing como candidato a quedarse con el torneo Clausura.
Que decir que no se haya escuchado a gritos en La Paternal, la palabra bronca rodea el corazón de todos los hinchas académicos, un partido que había que ganar y por distintas razones se perdió.
La banda invadió, como todos los fines de semana, el escenario que pisaba el elenco celeste y blanco. Con todos los resultados escritos en la tabla de posiciones, la gente esperaba una victoria para retomar esa fe ciega en la vuelta olímpica, esa que se perdió tantas veces en este campeonato.
“Racing mi buen amigo, esta campaña volveremo a estar contigo, te alentaremos de corazón, esta es tu hinchada que te quiere ver campeón”, entonaban eufóricos los simpatizantes de La Academia cuando sus jugadores, esos hombres de sueños inalcanzables, pisaban el verde césped.
El encuentro comenzó y un tema que hace mucho no se escuchaba retumbó por todo el barrio “Vamo vamo La Acade, hoy te vinimo a alentar, para ser campeón, hoy hay que ganar”. Los hinchas lo pedían a gritos, había que ganar para estar más cerca de la punta, esa que se sueña todas las noches.
Muchísimas situaciones de gol tuvo el conjunto visitante. La cantidad de goles errados fue increíble. El único que pudo gritar fue el mejor delantero de Racing, Teófilo Gutiérrez. Racing pasaba a ganar 1 a 0 y la banda entonaba: “Porque tenemo aguante, aguante de verdad, es la número uno, es La Guardia Imperial, que alegría que alegría, ole ole ola, vamos Racing todavía, que estas para ganar”.
Al instante de esa canción se volvió a escuchar un tema, una canción que hacía unas fechas no se cantaba: “Tenes que salir campeón este es el año, ustedes poniendo huevos y yo alentando, hace mucho tiempo, que la vuelta yo quiero dar, y este año academia no me podes fallar, vamo acade, vamo acade”.
El primer tiempo La Academia fue un equipo corto con claras muestras de buen fútbol. El desborde constante de Iván Pillud y Pablo Lugüercio, el hambre de gol de Teófilo, la bestialidad a la hora de marcar de Franco Zuculini y la atención de los defensores, fueron los puntos cables de ese primer tiempo.
El primer tiempo se fue cuando la número 1 gritaba: “Racing es mi alegría, yo por vos dejo la vida, ni la quiebra tampoco el descenso, nada puede con el sentimiento que siento por vos, yo te llevo en el corazón, por eso vengo, La Acade, mi pasión, la alegría de mi corazón, La Acade, siempre voy, esta hinchada quiere ser campeón”.
La gente buscaba un lugar para sentarse, el clima no era el mejor aliado pero el buen humor invadía la popular visitante.
En el segundo tiempo comenzó y las expectativas eran las mismas que en la primera mitad. “Vamo acade, vamo a ganar, donde jugués, yo voy a estar, vamo acade, vamo a ganar, cuidate rojo, vas a cobrar”, gritaban los hinchas.
En esa segunda parte, Racing parecía estar dormido y pecó todos los goles que se erro en el primero. Un show entre los defensores y el arquero de Racing terminó con el empate de Argentinos.
Ahora el partido era otro, un encuentro que debía estar 4 a 1 a favor de los visitantes estaba igualado en un tanto. La gente sabía que había que ganar por eso apuraba el trámite del encuentro “A donde vallas te alentamo siempre, no somo amargo como Independiente, y esta noche no podes perder, no podes La Acade”.
El local se agrandaba y se acercaba cada vez más al arco de Fernandez. La expulsión de Franco Zuculini, el penal no cobrado a Teófilo, el DESASTROSO arbitraje de Juan Pablo Pompei, la salida de Lugüercio, que venía haciendo un buen encuentro, en lugar de Gabriel Hauche, que no apareció en todo el partido, fueron algunas de las situaciones que derivaron en el segundo gol del Bicho.
“Movete Racing movete, movete y deja de joder, que esta hinchada está loca, hoy no podemos perder”, “vamo vamo vamo La Acade, vamoo La Acade”, el empuje de la hinchada no alcanzo y Racing cayó en un partido increíble.
Un encuentro que no se podía perder y se perdió, las explicaciones son todas validas pero lo cierto es que los tres puntos quedaron en La Paternal y el sueño de levantar esa copa tan ansiada pro todos los hinchas quedará, como tantas veces, para el año que viene.
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