Racing le ganaba bien al Bicho con gol de Teófilo Gutiérrez y solo tenía que liquidarlo. Pero a los 13 del segundo tiempo, en una jugada fortuita Salcedo marcó el empate y, 2 minutos más tarde, se fue expulsado Zuculini. A los 33, Prósperi liquidó el partido tras un rebote. En una jugada que fue penal, Teofilo fue amonestado por simular y no podrá estar ante River.
Fueron dos minutos fatales. En ese minúsculo lapso, Racing pasó de la alegría por el gol de Teo al espanto. Ese fue el tiempo entre el empate de Argentinos y la expulsión de Zuculini. Esos fatales segundos le permitieron al inerte rival de turno resucitar y quedarse con los tres puntos. Y le dejaron a Miguel Ángel Russo mas problemas que soluciones. Asi RAcing cayo por 2 a 1 ante Argentinos y otra vez se alejo de la pelea por el torneo.
La Academia comenzó el partido presionando y haciendo lo que mejor sabe: tocar el balón. Antes de los tres minutos, Hauche se lo perdió de media vuelta. En esos primeros instantes, Toranzo se mostraba muy desequilibrante y era la brújula precisa del equipo. La Academia no parecía desesperada por ir en busca del primer gol sino que manejaba la pelota con criterio y trataba de generar espacios ante un rival ordenado pero tibio en ofensiva. A los seis, hubo un cabezazo de Escudero que se fue afuera. Y, unos segundos después, Fernández descolgó bien una pelota complicada. A los 14, hubo un remate de Pillud a las manos del Navarro tras una jugada personal.
Teófilo se mostraba, buscaba sacarse de encima la marca y se las ingeniaba para escurrirse a las espaldas de los defensores. Y a los 17, el goleador de Barranquilla volvió a mostrar toda su clase: tras un pase preciso, se sacó de encima la marca en el área y sin dar margen a ninguna maniobra del arquero, la clavó contra la red con la cara interna del botín.
Más allá de la ventaja, Racing tocaba, abría la cancha, construía con inteligencia las ofensivas. A los 22, hubo un remate de Licht tras pase de Luguercio.
Un rato después, Toranzo la tiró por arriba cuando había quedado de frente al arco tras un pase de taco de Teófilo. A los 26, hubo un cabezazo del colombiano que se fue por arriba. Y luego un tiro cruzado de Licht. Racing era mucho más que su rival, avanzaba con velocidad y precisión, pero no lograba liquidarlo de contra. A los 29, hubo cabezazo de Salcedo sin dirección.
Dos minutos después, Licht remató por arriba ante un arquero apenas adelantado.
Mientras el local carecía de ideas y profundidad, el equipo de Russo volvió a ser aquel equipo solidario, de marca aguerrida y bien plantado que supo deslumbrar en las primeras fechas. Esta vez, las buenas intervenciones de Fernández impidieron que las escasas llegadas de peligro del Bicho terminaran en gol. Así, se cerró la primera parte.
En el arranque del complemento, a Racing le costó acomodarse. A los 10, hubo un remate de Zuculini a las manos del arquero tras pase de Toranzo. Dos minutos después, hubo un disparo de Mercier por arriba del arco.
Aunque Argentinos no lograba gravitar en el partido, a los 13 tuvo un premio inmerecido gracias a una gran distracción de La Academia: Salcedo le mando contra la red tras escurrirse entre Fernández y un defensor. Pero ahí no terminó el castigo para el equipo de Russo. Un minuto después, Zuculini vio la roja por tomar de la camiseta a un rival. Racing volvió a mostrar su peor cara y le concedió a su rival la posibilidad de resucitar en un partido en el que no había hecho nada. A pesar de todo, el equipo albiceleste se las ingenió para, aún con uno menos, seguir siendo mucho más que Argentinos. Como si el panorama no fuera desalentador, Teófilo fue amonestado en una jugada en la que lo tocaron en el área pero el réferi juzgó que el delantero simuló. En Brasil, China o Australia se habría sancionado penal pero, en cambio, eL colombiano se ligó una amarilla que le impedirá estar en el choque ante River (llegó a la quinta). Excepto que Molina pida que le quiten la injusta amonestación como sucedió con Martin Galmarini.
A pesar de todo, Racing siguió intentando: hubo un mano a mano desperdiciado por Teo y un remate de Licht que se fue por arriba. Argentinos tuvo alguna tibia llegada aislada. Pero a los 32, el equipo de Troglio consiguió el segundo: un tiro de Prósperi se clavo bien abajo y el arquero no llegó. A partir de allí, La Academia arremetió a su manera y tuvo alguna posibilidad de llegar a la merecida igualdad. Pero el tiempo se acabó y fue Argentinos el que festejó. Como sucedió en la Copa Libertadores, los jugadores del Bicho otra vez casi terminan a las trompadas. Con un expulsado, la quinta amarilla de Teófilo y una derrota sobre sus espaldas, Racing deberá encontrar la manera de levantar cabeza. Aunque las ilusiones de pelear el torneos serán difíciles de resucitar.
http://www.racing.com.ar/
No hay comentarios:
Publicar un comentario