Los dos refuerzos que llegaron apenas se abrió el libro de pases, hicieron su presentación oficial ante la gente. Ambos, de sobria actuación, quedaron expuestos por los compañeros que lo rodearon. Sin duda falta aceite, pero lo importante es que los engranajes están.
Integrantes de la columna vertebral de cualquier equipo. Indispensables a la hora de diagramar un conjunto con las características que Diego Pablo Simeone le quiere impregnar a este Racing versión 2011/2012. Faltos de fútbol, quizás, pero su categoría y estirpe se reflejan en el césped con tan sólo algunos pasos. Claro está que tanto Sebastian Saja como Agustín Pelletieri, tras los noventa minutos disputados en el Cilindro, concluyeron con una sobria actuación pese al mal desempeño que tuvieron sus laderos posicionales en un esquema poco comprensible para los jugadores con que dispone el técnico.
Si no fuese por el error defensivo que dejó a Saja mano a mano con Bielkiewicz, quien tras una correcta definición decretó el 1-0 parcial para el Bohemio, la actuación del ex arquero de San Lorenzo fue aceptable. A diferencia de De Olivera, Saja, en todos los envíos aéreos, salio con presencia, seguridad y decisión. No obstante, en los remates de larga distancia, tampoco dio rebote y así, demostró más allá de los pocos minutos en cancha, que brindar seguridad bajo los tres palos es una de las premisas ineludibles que cualquier plantel debe considerar si verdaderamente quiere posicionarse lo más alto posible.
Por su parte, el ex granate, Agustín Pelletieri intentó mostrar seguridad al lateralizar el juego e intentó, permanentemente, asociarse con un impreciso Patricio Toranzo quien en reiteradas oportunidades priorizó el juego individual sobre el colectivo. Criterioso e inteligente a la hora del retroceso, Pelletieri asoma tímidamente como un gran bastión de un plantel que todavía busca identidad.
Sin duda, el tiempo apremia y el debut frente a Tigre por la primera fecha del torneo Apertura 2011 está a la vuelta de la esquina. Con varios jugadores en carpeta, caso Lucas Castro y Luciano Aued, Simeone deberá barajar, volver a repartir las cartas sobre la mesa e inteligentemente diagramar esa jugada que coloque a Racing en las primeras planas.
Sin Giovanni Moreno ni Teófilo Gutiérrez, quienes observaron el encuentro sentados en el banco de suplentes, la entidad de Avellaneda necesita recuperar esa estela de identidad de juego que quedó vagando meses atrás. Para darle forma a este indescifrable estilo futbolístico, Saja y Pelletieri aportan una gran cuota de calidad pero no hay que perder de vista el objetivo, para ser autocríticos y razonar que todavía a este equipo le falta ruedo.
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