El plantel entrenó a puertas cerradas, entre fútbol – tenis, pelota parada y ensayos estratégicos. En las últimas horas, previas al clásico de Avellaneda, Simeone disipa las dudas y prepara el equipo. Pillud jugará, Aued mantendría el puesto y Hauche sería el único cambio.
Cada vez queda menos. La Academia se prepara para afrontar el partido más importante del año. Al Racing – Independiente le quedan horas, minutos, y el Cholo Simeone intenta abstraerse de la ansiedad generalizada, piensa y re piensa su equipo y ultima detalles.
El plantel de Racing entrenó esta mañana a puertas cerradas en Avellaneda. La rutina consistió en tareas en el gimnasio, partidos de fútbol reducido en el estadio, ensayos estratégicos y de pelota parada y un tiempo de distracción con fútbol – tenis.
Por su parte, Iván Pillud, quien acarrea una sobrecarga en su aductor izquierdo, trabajó con normalidad y a la par de sus compañeros, llevando cargas más livianas para que llegue en óptimas condiciones al duelo del domingo.
En cuanto al equipo hay pocas novedades. Simeone juega al misterio y mantiene la expectativa a través de la inclusión de Lucas Castro. Sin embargo, es difícil que el Pata juegue y, de ser así, Luciano Aued mantendría su puesto. Las otras opciones, aunque en menor medida, son el ingreso de Valentín Viola o Pablo Lugüercio. De esta manera, se avizora una sola variante (obligada) respecto del partido con San Lorenzo: Gabriel Hauche por el lesionado Patricio Toranzo.
Mañana será la última práctica, también a puro hermetismo, y con el posterior conocimiento de los convocados por el Cholo.
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