miércoles, 6 de enero de 2010

Se hace desear demasiado


Claudio Bieler hoy debía firmar su contrato con Racing. Pero surgieron algunas trabas y habrá que ver si mañana se define. Además, Hernán Barcos se iría a la Liga de Quito como parte de la negociación.


Todavía no. Otra vez un “pero” que amenaza una negociación que parecía cerrada. El delantero Claudio Bieler debía firmar hoy su contrato con Racing. Sin embargo, surgieron algunas trabas que impidieron que la operación se cerrara exitosamente. Mañana continuaran las conversaciones para que el acuerdo se concrete.

El jugador, su representante Gustavo Lescovich y los dirigentes de la Academia se habían reunido este mediodía para sellar el acuerdo. Pero la situación no llegó a buen puerto, el delantero no acudió al entrenamiento como se esperaba y habrá que ver que sucede mañana. Hay dos campanas diferentes sobre la razón de la complicación.

Desde Racing argumentan que les faltan papeles de la Liga de Quito y aguardan presentarlos mañana. Por el lado del jugador, manifiestan que el problema es la cifra que recibiría el futbolista.

“Para nosotros todo estaba cerrado. Incluso recibimos la llamada de un empresario de México realizando una buena oferta, pero ya teníamos un compromiso con Racing. Ahora, no se determina el acuerdo, se abrirán otras posibilidades. Lescovich ayer me confirmó que se había resuelto el pase de Bieler y que venía con Hernán Barcos como parte de pago”, aseguró en declaraciones a los medios, Rodrigo Paz, director de la comisión de fútbol de La Liga.

Según trascendió, el delantero Hernán Barcos forma parte de la negociación por Bieler, La oferta de la Academia era pagar a Liga 2.000.000 de dólares por el 50% del pase de Bieler. Y además, se sumaba la posibilidad de ceder los derechos de Barcos al club ecuatoriano. Desde que regresó de China, Barcos había dejado en claro que su prioridad era emigrar hacia otro club.

Mañana será un día clave para saber si finalmente se concreta el pase de Bieler. A estas alturas, se esta haciendo desear demasiado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario