Algo atípico está a punto de suceder en Racing. No porque vaya a llegar un jugador Chileno, sino por la manera en la cual llegará éste. Quedó libre en Unión San Felipe y cae a Avellaneda. Hasta acá algo común, pero lo que marca la rareza es que: Lihue Prichoda, también fue liberado y cayó al club donde jugaba Gonzalo Espinoza.
Pelletieri, Toranzo, Yacob, Mayorga, Poclaba y Bruno Zuculini, eran los volantes centrales que tenía a disposición Diego Pablo Simeone. Esta larga lista de jugadores fue mermando con el transcurso de los días, y por la idea que tienen los directivos, seguirá disminuyéndose. Mayorga emigró a Acassuso, Poclaba fue cedido a Nacional de Montevideo y el deseo de los popes académicos es que Yacob sea transferido al fútbol extranjero. Claro está que ante todas éstas bajas es necesario adquirir un volante central, o bien, no vender a La Flaca.
Con todos estos temas sobre la mesa, aparece el nombre de Gonzalo Espinoza. El volante de veintiún años habría sido liberado por el club de Chile y un grupo inversor adquirió parte de su pase y lo ubicó en Racing. Lo llamativo de esto es que Lihue Prichoda fue soltado de la institución de Avellaneda libre y sin tener que poner un peso, el equipo chileno lo tendrá.
Otro aspecto a señalar es que: en Chile, la información que rueda es que Racing compró el 25% del pase, otro 25 se lo adueñó el mismo grupo inversor que trajo a Giovanni y a Téo, mientras que el 50% restante quedó en manos del equipo trasandino. Éste mismo mensaje no es el que corre en Avellaneda, algo que sin dudas deja cosas para preguntarse.
Diferencias en la información en los distintos clubes, jugadores que se “regalan” de club a club, los dirigentes de Racing que solamente hablan con periodistas amigos, y así, podríamos seguir. ¿Qué raro todo no?
http://www.racing.com.ar/
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