Una multitud acompañó a La Academia en un encuentro importantísimo para seguir en la punta del campeonato. Un cuatro a cero se vio acompañado por un aliento constante que no paró en ningún momento.
Los diarios, la televisión e Internet anunciaban que la próxima parada del tren académico iba a ser en Santa Fe ante el siempre complicado Colón. En autos particulares, micros y personas propias de la ciudad se acercaron al estadio en busca de la victoria.
La popular completamente repleta fueron las fotos conseguidas por todos los fotógrafos. La Guardia Imperial colgó sus banderas y con sus bombos se sintió más local que nunca.
Una vez iniciado el cotejo, por toda la cancha se escuchó: “Porque tenemos aguante, aguante de verdad, es la numero 1, es La Guardia Imperial, que alegría que alegría, ole ole ola”.
Los primeros minutos se hicieron complicados para ambos equipos y el sinónimo común del encuentro fue el conflicto entre ambos equipos. Las patadas a flor de piel pero la hinchada impuso respeto: “Ponga huevo La Academia ponga huevo y corazón, que esta hinchada se merece ser campeón”.
El rival de turno era el complicado Colón, un equipo que en su historia se hace fuerte de local pero en este campeonato el destino le está jugando una mala pasada. Pese al juego, la muchedumbre académica se acordó de lo que pasa siempre que uno pisa el Cementerio de los Elefantes: “Sabalero vigilante, allá en Santa Fe la yuta es tu aguante”.
Por la fricción del juego, Claudio Yacob quedó tirado en el campo de juego. La gente empezó a desatar un grito de guerra cual la intención era que los jugadores académicos no se sientan atemorizados, “La acadee la acadee, la academia la acadeee”.
Gabriel Hauche desborda por izquierda y luego de un intento de pase atrás, la pelota le quedó a Pablo Lugüercio quien rompió la red con un bombazo arriba. El hit del campeonato del 2001 se volvió a escuchar, esta vez, mas fuerte que nunca “Tenes que salir campeón este es el año, ustedes poniendo huevo y yo alentando, hace mucho tiempo que la vuelta yo quiero dar, y este año academia no me podes fallar, vamo acade”.
El resultado estaba a favor de los dirigidos tácticamente por Miguel Ángel Russo y el objetivo de esta noche se estaba cumpliendo a la perfección. Por eso, la hinchada cantaba “La Academia mi pasión, mi enfermedad, aunque ganes aunque pierdas voy a estar, la locura se transforma en carnaval, los domingos con La Guaria Imperial, te alentare hasta la muerte, te alentare donde sea, lo único que quiero es ver a Racing campeón, la vuelta en Avellaneda”.
El resultado continuaba igual y Racing controlaba el partido, pese a que las infracciones seguían siendo una distracción para todos. “Los domingos a la tarde, a Racing yo lo vengo a ver, yo te sigo a todas partes, siempre a donde jugues, solo te pido que ganes, pongas huevo y corazón que la numero 1 te pide que salgas campeón”, entonaban eufóricos los visitantes.
El segundo de la noche fue, otra vez, para Racing. Esta vez, el autor del tanto académico fue quien es uno de los goleadores del torneo, Teofilo Gutiérrez. En ese momento por todo Santa Fe se estaba escuchando “yo paro en una banda, que es la mas loca de todas” pero el “goool” hizo poner la piel de gallina a mas de uno.
Dos a cero a favor y una goleada también en la tribuna. Todo era de Racing, el partido, el juego, el toque, el clima en el estadio, el ambiente. Por eso la gente se aprovecho de la ocasión y se expresó con un “Somos locales otra vez”.
Así se iba el primer tiempo y la alegría en la tribuna visitante era algo increíble. El sueño se empieza a hacer realidad de a poquito y la negación ya queda en el olvido, todos somos participes de este Racing.
En los primeros minutos de la segunda mitad se vino una canción frente a los amargos: “hay Independiente que risa me das, te corrió La Guardia Imperial, fueron todos al hospital, hay independiente que pu.. que sos”.
Si algún señor de mayor edad se había ido a dormir durante el transcurso del encuentro, llegó un momento en el cual un salto pego de su cama porque sintió vibraciones en el piso, no fue ningún terremoto sino que se escuchaba un “De pendejo te sigo, junto a Racing siempre a todos lados, nos bancamos la quiebra, el descenso y fuimos alquilados, no me olvido ese día, que una vieja chiflada decía, que Racing no existía que tenia que ser liquidado”.
Dos goles más para La Academia y el partido cerrado con una goleada cuatro a cero. La esperanza es una constancia en el prode académico y el próximo partido será importantísimo. Las banderas al viento, todas las remeras formando un remolino y el “Ole ole ole, cada día te quiero más, yo soy de Racing que es un sentimiento no puedo parar”, tenían la noche rosarina.
Racing ganó un partido clave en la pelea por el campeonato Clausura, los torneos se definen por uno o dos puntos de diferencia y La Academia hoy consiguió tres claves. El sueño se esta empezando a hacer realidad.
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