Teofilo Gutiérrez, Pablo Lugüercio y Gabriel Hauche forman el tridente ofensivo de La Academia. Tres partidos ellos juntos en la cancha, los tres cotejos con triunfo para Racing, mamita...
El juego ofensivo domina al defensivo, decía algún sabio plateista por algún rincón de alguna cancha del fútbol argentino. Las creaciones de mitad de cancha hacia adelanta, la astucia a la hora de picar en posición de gol y la definición son características de jugadores calificados como “delanteros”.
El técnico de Racing, Miguel Ángel Russo, pone en cancha a los tres delanteros juntos. Con dos de ellos busca el desequilibrio y el mareamiento defensivo, y con el otro busca el pivoteo constante y el tan ansiado gol.
Pablo Lugüercio es el jugador mimado por los hinchas, el hombre que desde hace ya muchos años viste la celeste blanca. A fuerza de sacrificio, entrega y sudor se ganó el amor de los hinchas académicos.
Hoy en día el payaso es una pieza fundamental en este rompecabezas de once partes. Le aporta el desborde por ambas bandas, puede jugar de volante y por algunos momentos de doble cinco, y ahora cosecha goles. Esta noche abrió la cuenta para el conjunto de Avellaneda y, de esta manera, el equipo visitante tuvo mas espacios.
Por eso se ganó el respeto de los fanáticos académicos, porque por más que no haga muchos goles, es un hombre fundamental en este equipo.
Por otro lado se encuentra Gabriel Hauche. El ex Argentinos todavía no pudo explotar todo el potencial interior que tiene: es una bestia, un demonio.
En el partido de esta noche se lo vio rápido por los dos costados de la cancha y participo de los tres goles de manera importante. Todavía le falta ese poder de gambeta y la agilidad de potrero para encarar en el uno contra uno y la definición es algo que lo preocupa, pese a que hoy marcó el cuarto tanto por encima del guardameta.
Ahora llegó el turno del mejor jugador de la noche: Teofilo Gutiérrez. “Papa que jugador!” se relamen los simpatizantes académicos al verlo jugar a este colombiano que le mantiene viva la ilusión a todo un pueblo celeste y blanco.
Este hombre pivotea, se tira atrás para descargar, es habilidoso, presiona a los contrarios en todos los sectores de la cancha y, para colmo, es el goleador del campeonato. Cuando se hablaba el campeonato pasado de que a algunos jugadores “la pelota no le llegaba” por eso no hacia goles, esta jugadoraso demostró que al balón hay que ir a buscarlo y que si la suerte no esta en tu carril, intenta cruzarte de banda.
En la noche de hoy, “Teo” consiguió dos goles y marcó uno pero estaba en offside. Tiene el olfato mejor que cualquier catador de olores, es goleador, un pura raza.
La Academia tiene tres hombres importantes en ataque que combinado con jugadores como Toranzo, Yacob y Pillud pueden hacer vibrar a todo un pueblo que espera ansioso una vuelta olímpica.
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