Dos reconocidos en Avellaneda en una tarde desafortunada en la ejecución desde los doce pasos para ambos, pero se fueron ovacionados desde la popular.
Salió Racing al campo de juego por la puerta que se encuentra debajo de la cabecera local y a los pocos minutos llegó el primer reconocimiento de la tarde. Se escuchó un “Lugüerciooo, lugüerciooo” que fue aumentando a medida que transcurría el encuentro.
Pablo Lugüercio había decidido, esta semana, quedarse en Racing cuando Banfield y Huracán lo requerían para formar parte de sus equipos.
El “Payaso” llegó al conjunto de Avellaneda en el 2008 y, desde que debutó, enamoró a los hinchas académicos con su entrega, sacrificio y perseverancia. A veces criticado, por la minoría, por su falta de gol pero siempre aplaudido por ser el ÚNICO que intentaba generar peligro en el arco contrario.
La gente no se olvida de eso y se produjo la segunda ovación para el hombre oriundo de La Plata. Iban 36 minutos del primer tiempo y el conjunto de Boedo, Almagro y Bajo flores ganaba el encuentro 1 a 0 con un golazo del delantero, Emiliano Alfaro. Pero desde un tiro libre de Toranzo (el mejor jugador del partido) llegó el empate académico. Y si, el tanto lo marcó Lugüercio; y se volvió a gritar por el ex Estudiantes.
Desde ese momento hasta que terminó la ejecución de penales, los hinchas locales reconocieron una y otra vez a este hombre de 28 años que deja todo en cada partido que juega con la Celeste y Blanca.
Hablamos de sacrificio ahora hablemos de buen juego. Y como no hacer mención al futbolista que, en la tarde de ayer, demostró ser un dotado a la hora del manejo de la pelota y la entrega de la misma. Es que Patricio Toranzo se convirtió en el mejor jugador del partido a base de juego, toque y destellos de calidad que hacía mucho no se veían por Avellaneda.
El “Pato” fue, hasta ahora, el mejor refuerzo de Racing de esta segunda parte del año. Ayer y en los amistosos que jugó la Academia, el juego se basó en este mediocampista nacido en Buenos Aires.
El ex Huracán lleva poco tiempo en el club pero promete seguir haciendo delirar corazones celestes y blancos con juego, toque y una pegada revolucionaria.
Lugüercio y Toranzo fueron los únicos que erraron los penales ante San Lorenzo (convirtieron Lucas Aveldaño, Lucas Castromán y Giovanni Moreno).
Un equipo renovado con jugadores de buen pie y sacrificio que prometen llevar a Racing a lo más alto este campeonato.
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